Los grandes mensajes nunca pierden su valor.

domingo, 27 de mayo de 2012

Carnaval de la vida



Tarde de domingo se despide en esta tarde de primavera, las calles de la ciudad vuelven a sus casas las princesitas y marineritos después de un día de nervios, emociones y celebraciones. Los últimos inquilinos de la playa llegan a sus moradas en la toalla en mano en busca de una reconfortable ducha. 
Mañana lunes caras avinagradas pululan por los transportes públicos de la ciudad en dirección al trabajo o la universidad. Otros desgraciadamente se dirigirán a las oficinas del Imen con poca esperanza y desolación en sus semblantes del extraño vía crucis del maldito paro.
La radio matinal en todos los diales las palabras, déficit, rescate, paro, crisis, serán repetidas hasta la saciedad, todos los tertulianos que frecuentan las emisoras nacionales que entienden de todo y realmente de nada, propondrán sus recetas económicas mágicas
Un lunes donde el sol será la luz de los enamorados, que los poetas dibujaran corazones en sus palabras. El verano pide paso a la primavera, el calor hace mella cuando caminas por el sol en cualquier acera de la ciudad. Las heladerías dejaran constancias de sus exquisitos helados para la degustación del cliente que tomara un pequeño respiro debajo de una sombrilla contemplado el atasco de la ciudad acompañado del concierto de cláxones que se convierte la ciudad en las horas centrales del día. 
Feliz semana.

Quiéreme


Luz del amanecer.
Luna de los sueños.
Deseo en tu cuerpo.
Ojos de amor.


Susurros en mis palabras.
Amor en ellas.
Corazón enamorado.
Princesa de mis noches.
Reina de mis días.


Pintor del amor.
Lienzo de corazones.